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Edificación de Dios en vez de heterodidascalías.-
Leemos en la primera carta de Pablo a Timoteo, en el capitulo uno, los versos tres y cuatro: "Como te rogué que te quedases en Éfeso, cuando fui a Macedonia, para que mandases a algunos que no enseñen diferente doctrina, ni presten atención a fabulas y genealogías interminables, que acarrean disputas más bien que edificación de Dios que es por fe, así te encargo ahora."
Es importantísimo ver la carga del apóstol, encomendándole a Timoteo centrarse en aquello que es para la edificación de Dios por la fe. Le dice: "no prestar atención a fábulas y genealogías interminables, cosas que acarrean disputas". Vemos en el verso tres a algunos que estaban enseñando diferente doctrina, heterodidascalía. Esa diferente doctrina es en relación a la edificación de Dios que Pablo le está encomendando a Timoteo. Por eso le dice que: "mandases a algunos que no enseñen diferente doctrina, ni presten atención a fabulas y genealogías interminables, que acarrean disputas más bien que edificación de Dios”.
La palabra aquí traducida “edificación”, en el original griego es "oikonomía"; que también se ha traducido como “dispensación” en otros lugares, o como “administración”, o como “mayordomía”, o como “comisión”. Dios tiene un programa, Dios ha hecho un arreglo administrativo para dispensarse en el hombre y para tratar con Su enemigo, para recuperar al hombre y llevar adelante Su propósito; y la carga de Pablo es que Timoteo no se distraiga, y que enseñe a no distraerse con minucias menores y salirse por las ramas descuidando lo central y lo principal de la administración Divina que es la edificación de Dios.
Es interesante notar que, en esta primera carta a Timoteo, Pablo le dice: "te rogué que te quedases en Éfeso".
Si nosotros estudiamos la situación de Éfeso, y vemos la primera carta a los Efesios, la que el Espíritu envió por Pablo, vemos allí un gran nivel elevado en la iglesia; pero cuando vemos la segunda carta a los Efesios, la que el Señor Jesús envió por el apóstol Juan en el Apocalipsis, allí vemos que Éfeso estaba en peligro de perder el candelero en su lugar. La iglesia en Éfeso estaba perdiendo su primer amor; es más, había perdido su primer amor; y entre la carta a los Efesios de Pablo y la del Apocalipsis, vemos la primera carta de Pablo a Timoteo. Lo que le pasó a la iglesia en Éfeso fue que se desvió de la línea de la edificación de Dios hacia cosas menores, a heterodidascalías, a diferentes doctrinas que acarrean disputas.
El Señor nos centre a todos en la edificación Suya.
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